🔥Pasión por Dios - Evita que el Fuego se Apague
“Del tamaño de tu búsqueda será la intensidad de tu fuego.”
📖 Lectura bíblica: “No apaguéis al Espíritu.” – 1
Tesalonicenses 5:19
🙌 Hay que mantener encendido el
fuego por Dios
Pablo, inspirado por el Espíritu Santo, escribe a los creyentes de Tesalónica exhortándolos a no “apagar al Espíritu”. Esto va más allá de evitar un pecado obvio; se trata de no dejar que pasen días enteros sin buscarle, sin tener un espacio donde Él pueda hablar, consolarnos o impulsarnos.
- Silencio interior: A veces guardamos rencores, críticas o dudas que cubren nuestra sensibilidad espiritual. El Espíritu desea fluir libremente, pero los recelos del corazón lo sofocan.
- Ambientes equivocados: El contenido que consumimos (series, redes sociales, música) puede distraernos tanto que no dejamos lugar para el soplo de Dios.
- Actividades sin sustento: Podemos estar tan ocupados en “hacer para Dios” que olvidamos pasar tiempo con Él. Entonces corremos el riesgo de convertir la vida cristiana en un programa mecánico.
Cuando
dejamos intacta cualquier de estas situaciones, estamos, sin darnos cuenta,
“apagando” el Espíritu. Dios nos renueva la mente y el corazón día tras día. Si
ignoramos Su voz, poco a poco, el frío se instala en el alma.
🌄 Cómo mantener el fuego encendido
- Busca a solas a Dios cada día: Aparta unos minutos sin distracciones, con la Biblia en mano, para permitir que el Espíritu te encienda de nuevo.
- Lee la Palabra con expectación: Deténte en un versículo, medítalo y déjalo calar en tu corazón. Cada pasaje puede ser leña para tu fe.
- Entrega tus preocupaciones al Señor: Antes de que la ansiedad se apodere de tu mente, ora. Una mente en paz es terreno fértil para el Espíritu.
- Adora con gratitud: Canta o alaba, incluso si no sientes gran emoción. La gratitud abre puertas para que el Espíritu avive tu llama.
- Rodéate de “llamas amigas”: Elige compañía que te impulse a buscar a Dios y te anima a no descuidar la oración.
- Revisa tu día cada noche: Pregúntate cuándo sentiste a Dios y qué te alejó de Él. Esa reflexión te ayuda a avivar las brasas al día siguiente.
- Depende del Espíritu Santo: Reconoce que tu fuego no vive solo de tu fuerza. Ora: “Señor, sopla sobre mis brasas y reaviva mi pasión”.
💡 El Espíritu no se apaga por falta
de emoción…
Se
apaga por falta de entrega.
¿Hace
cuánto no lloras en la presencia de Dios?
¿Hace cuánto no tiemblas ante Su voz?
¿Hace cuánto no te quemas por dentro con Su Palabra?
No
dejes que lo profundo se vuelva automático.
No dejes que la llama que un día te encendió se convierta en una historia
vieja.
🔥 Volver a arder
- Vuelve al lugar secreto.
- Vuelve a cantar solo para Él.
- Vuelve a leer la Biblia como la primera vez.
- Vuelve a rendir tu vida con sencillez y hambre.
- Vuelve al fuego… y quédate ahí.
💭 Pensamiento del día:
“Un
minuto a solas con Dios puede reavivar las llamas que parecían extinguidas.”
🙏 Oración
Padre,
no quiero vivir con un fuego apagado.
No quiero hacer cosas por inercia ni servirte con un corazón frío.
Vuelve a soplar sobre mi espíritu.
Vuelve a encender lo que el tiempo, las heridas o la rutina apagaron.
Hazme una llama constante que arda por Ti.
Amén.
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✨
Porque cuando una llama ardiente decide permanecer en Dios, enciende otras
llamas.
¡No
te apagues, camina con Dios y deja que tu fuego permanezca encendido! 🔥
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